Todos sabemos, o deberíamos saber, la importancia que tiene
nombrar algo o a alguien. Dar nombre a un objeto o persona es dotarlo de unas
cualidades, una ”fisicalidad”, hacerlo tangible, hacer que tenga algo de nosotros
mismos o nuestros gustos.
Es por esto que reflexionando he llegado a la conclusión de
que mi nombre, dependiendo de la época de mi vida por la que pasaba, ha
cambiado. Es lo bueno de tener un nombre versátil y con el que poder hacer
distintas combinaciones, como es María José.
Tiene múltiples posibilidades, podría ser “María José” a
secas, “Mariajo”, “Majo”, “Mery”, “Meryjoe”, “Marijose”, “Mari”, “María”… Y
creo que podría seguir enumerando más de una opción, pero prefiero pasar a lo
que venía a contar en un principio, que es la historia de mi nombre.
Me llamo María José porque tuve a bien nacer mujer,
obviamente. Si hubiese nacido hombre lo más probable es que me llamase “José
Antonio” (un nombre muy original, ¿eh? Mi abuela, que quería que me llamase
como mi abuelo… A lo que mi madre se negaba porque su ex marido lleva también
dicho nombre. Historias familiares, vamos). No me llamaron “Josefa”, que es
tanto el nombre de mi abuela como de mi madre, porque como me ha dicho esta
última en más de una ocasión “Josefa es un nombre demasiado feo, no te iba a
poner eso”. Supongo que gracias, mamá. Mi abuela paterna, con la que
prácticamente me crié, me llamaba desde pequeña “María” (decía que era su
nombre favorito), y por ende, toda persona que me conocía y conoce a través
suya me llama “María”. También me llama “María” un amigo americano que tengo
que es ultracatólico. Dice que es su nombre favorito. Tenemos aquí la primera
denominación:
Nº 1- María- abuela paterna y gente que me conoce por ella;
amigo americano ultracatólico.
Sigamos. En mi casa, como nombre cariñoso, siempre me han
llamado “Mari”. Me siguen llamando así por lo general mis padres, mis hermanas
y mis sobrinos. Incluso algunos de mis primos más cercanos me llaman “Mari”.
Este también lo ha usado alguna amiga en la época del instituto, pero que yo
recuerde ahora mismo nadie más fuera de mi casa me llama así.
Nº 2- Mari- familia muy cercana y alguna amiga en el
instituto.
Continuando con los nombres en la familia, desde hace unos…
7 años en casa me llaman “Tali”. Y os preguntaréis… ¿Tali? ¿Esa mier…
preciosidad de nombre de dónde sale? Pues bien, la historia se remonta al
momento en el que mi sobrino Hugo estaba empezando a hablar. Intentamos
enseñarle a decir el nombre de las tías y los miembros de la familia, pero no
sabía pronunciarlos, así que su versión de “Mari” fue “Tali”. A los habitantes
de mi casa les hizo gracia, y así me he quedado, como “Tali”. Hace un par de
meses le confesé a mi madre que no me gustaba, y está haciendo el esfuerzo de
intentar cambiarlo, o eso creo, pero es demasiado tarde. Llevaré esa lacra
encima toda la vida. Maldito Hugo. Ya me vengaré, ya.
Nº 3- Tali- familia muy cercana, culpa de mi sobrino.
“María José” siempre me ha sonado muy a señora mayor, nunca
ha sido un nombre que me haya encantado. De hecho de pequeña siempre fantaseaba
con cambiarme el nombre al ser mayor, pero una aprende a vivir con ello, o a
modificarlo lo suficiente como para hacer que no me suene tan mal. Dicho esto, “María
José” suele llamarme la gente que no tiene mucha confianza conmigo o no me
conoce lo suficiente, o los profesores, por ejemplo. También lo usan en mi casa
cuando quieren llamarme y les ignoro o están enfadados conmigo. La verdad es
que no me gusta que me llamen así, cuando alguien lo hace me suena bastante
mal, lo veo demasiado serio. No pega conmigo en este momento de mi vida.
Nº 4- María José- nombre oficial. Gente que no tiene mucha
confianza conmigo, familia enfadada, profesores.
A ver qué más… “Mery”, mismo, o “Mary”, que es como se
escribiría bien. Una amiga en el instituto me llamaba “Mery” todo el rato, en
4º de la ESO más concretamente. Qué gran año… Pero bueno ese es otro tema.
Ahora también me llaman “Mery” mis hermanas de vez en cuando. Y “Mary” me han
llamado toda la vida en la academia de inglés a la que iba, que es básicamente
donde aprendí todo el inglés que sé. Allí a todos los alumnos nos traducían el
nombre a inglés, o si el nombre no era traducible nos daban otro que empezase
con la misma letra. Por ejemplo en mi clase había un chico que se llamaba
Sixto, y como no existía en inglés pues le llamábamos Steven.
Así que creo que Mary es un buen nombre, me ha traído más
alegrías que desgracias. Aunque hay alguna anécdota en la academia que se
merece un capitulillo entero… Pero en fin.
Nº 5- Mery/ Mary- amiga en 4º de la ESO, mis hermanas;
Academia de inglés.
“Mery Joe” me llama mi preciosa Carmen, a la que conocí en
Irlanda hace cuatro años y con la que voy a clase actualmente. Y a la que
quiero infinitamente, todo hay que decirlo. Y ahora mismo no recuerdo que nadie
más me llame así.
Nº 6- Mery Joe- Es como me llama mi Carmen ♥
Un nombre que antes usaba mucho y ahora… No uso, es
“Marijose”. En su momento lo veía bastante “yo”. Me sonaba dulce, bonito. Pero
ahora me suena a cosas que no me gustan. Ese nombre es con el que me conoció mi
ex novio, y como se llama su madre (a la que quiero muchísimo), quizás por esto
es por lo que no me apetece que lo usen más, porque me recuerda a él y a todo
el tiempo que estuve con él. Toda la gente que me conoció cuando tenía entre
los… 15 y 18 años me llama así. O me llamaba, al menos con los que no tenía
contacto, con los que sí tengo no suelen llamarme de esta manera. Bueno, sí, a
veces. Pero hay ciertas personas que no sé si cuentan. xD
Nº 7- Marijose- nombre que usaba de los 15 a los 18 en
público, y a partir de ahí con la gente de la que me rodeaba, que tampoco era
tanta. Nombre con el que me llamaba mi ex.
Y aquí llegan los dos nombres que uso ahora, este es el que
menos me gusta de los dos, “Mariajo”. Para diferenciarme de su madre, mis ex
cuñados me empezaron a llamar “Mariajo” porque como ya he dicho a su madre la
llaman “Marijose”. Bastante gente me llama “Mariajo”, me siento cómoda con ese
nombre, y está bien. Pero no sé, no es el nombre con el que más identificada me
siento ahora mismo. También me llamaban “Mariajo” de pequeña y hacían la típica
coña con lo de –ajo, y algunas personas llegaron hasta a hacer la megagracia de
traducirlo a inglés y llamarme “MaryGarlic”. En fin, cosas de críos y gente graciosilla.
¡Ah! Y también me llaman “Mariajo” por Subcultura, porque es el nombre de
usuario que tengo.
Nº 8- Mariajo- familia de mi ex; de pequeña, en el colegio;
Subcultura.
Y el último que voy a mencionar hoy es “Majo”. Puede sonar
absurdo, o pareceros una tontería, pero este nombre me transmite una fuerza
increíble, tiene energía, no sé, es lo que me hace sentirme el ‘autodenominarme’
así. Me parece que es cómo quiero que sea mi vida en este momento, quiero
energía, hacer cosas nuevas, conocer gente, cambiar, espero que para mejor,
pero cambiar. Estoy bastante contenta con el “Majo”, y últimamente a cualquiera
que conozco le digo que me llamo así, aunque en realidad no mucha gente me
llama “Majo”. Pero bueno, yo lo intento, que me gusta mucho. ^^ Igual dentro de…
5 años lo he aborrecido y vuelvo al “Mariajo”, o me gusta que me llamen “María
José” y sentirme más señora. Pero de momento… Me quedo con el “Majo”.
Nº9- Majo- como me gustaría que me llamasen ahora mismo.
Bueno, ya que me he quedado con 9, para redondear mencionaré
uno que me hace mucha gracia y que ya he comentado por internet, y es “Moose”.
Os preguntaréis qué tiene que ver “Moose” con “María José” aparte de que
comienzan por “M”. Pues bien, tengo un amigo californiano, mu majo él, que un
día de charla por Skype me preguntó cómo se pronunciaba mi nombre, porque no
sabía cómo era (él lo pronunciaba como /maio/). Y el “Villalobos” ya pa qué
comentar lo que pronunciaba… Bueno, va, pronunciaba /vilabús/ (Villaboose en su
idioma californiano). Pues dijo que “Majo” le parecía demasiado complicado de
decir, y que mejor se inventaba otro nombre para mí. Y lo que le vino a la
cabeza fue “Moose”, que como sabréis los que habláis inglés (o quizás no
sabréis, no sé), significa “alce”. Yo le dije que por qué me llamaba así, que
no tenía nada que ver con mi nombre, pero él dijo que era la mezcla de “Majo” y
“Villaboose”. Y ya está, de ahí sale “Moose”, que me parece un nombre
divertido, pero… Eso, para que lo use él, no nadie más. Que por cierto, los
alces son feísimos… En fin, prefiero no verlo por ese lado.
Nº 10- Moose- es cómo me llama Tyler, mi amigo de
California.
Y podría seguir con algunos motes, peeeeero llevo ya varios
días escribiendo esto, y si lo sigo alargando no termino ni el año que viene. Vamos
a hacer un recuento final:
Nº 1- María- abuela paterna y gente que me conoce por ella;
amigo americano ultracatólico.
Nº 2- Mari- familia muy cercana y alguna amiga en el
instituto.
Nº 3- Tali- familia muy cercana, culpa de mi sobrino.
Nº 4- María José- nombre oficial. Gente que no tiene mucha
confianza conmigo, familia enfadada, profesores.
Nº 5- Mery/ Mary- amiga en 4º de la ESO, mis hermanas;
Academia de inglés.
Nº 6- Mery Joe- Es como me llama mi Carmen ♥
Nº 7- Marijose- nombre que usaba de los 15 a los 18 en
público, y a partir de ahí con la gente de la que me rodeaba, que tampoco era
tanta. Nombre con el que me llamaba mi ex.
Nº 8- Mariajo- familia de mi ex; de pequeña, en el colegio;
Subcultura.
Nº9- Majo- como me gustaría que me llamasen ahora mismo.
Nº 10- Moose- es cómo me llama Tyler, mi amigo de
California.
Y con esto y un bizcocho… Si has llegado hasta aquí ya me
conoces un poco más. ^^